JORNADAS INTERNACIONALES DE ARTE RUPESTRE
"EL RASTRO MAS ANTIGUO DE LA ESPIRITUALIDAD HUMANA"

Salta, Octubre de 1997


"PIRGUAS DEL SOL :
Espacios Sagrados y Pinturas Rupestres en Guachipas" (Salta - Argentina)

Lic. Mirta Santoni (UNSa - Museo de Antropología de Salta)

Mus. Miguel Xamena (Museo Arqueológico de Cachi  "Pío Pablo Díaz")

MIGUEL XAMENA

Antes de comenzar con este análisis sobre las pinturas rupestres de Guachipas, queríamos hacer una breve reflexión acerca de algunas medidas o puntos que tenemos que tener en cuenta y llegar a coincidir forzosamente por que es de interés de todos, esto es "La preservación del Patrimonio Cultural".

Hemos visto con Mirta, trabajando en Guachipas que uno de los problemas fundamentales del estudio del patrimonio cultural, específicamente del arte rupestre, es el gran estado de deterioro en que se encuentran los restos. Trabajando en Guachipas hemos podido comprobar que la gente acude permanentemente en calidad de turistas o simplemente curiosos y que no tienen una conciencia formada acerca del valor que tiene este patrimonio.

Ultimamente Salta ha tomado un camino para su desarrollo que incluye al turismo como punto clave, es por ello que permanentemente escuchamos a funcionarios, empresarios de servicios de turismo, hablar de la puesta en valor de nuestro patrimonio cultural para usarlo como un atractivo mas.

Esta "puesta en valor" es un termino relativamente nuevo, no existe en los diccionarios, ni siquiera en diccionarios de ideas, y creemos que es fundamental establecer su significado. La puesta en valor no es únicamente una medida gubernamental, ni es una medida legal, ni tampoco una decisión arbitraria que signifique mostrar nuestro patrimonio ; la puesta en valor debe ser un proceso que incluye forzosamente el estudio, el análisis, las medidas de preservación, de conservación y dependiendo del criterio de los investigadores puede incluir también la restauración. Es decir, no podemos permitir que se llame "puesta en valor" al simple hecho de exponer nuestro patrimonio ; es por ello que hacemos hincapié en la necesidad de concientizar no solo a nuestra clase dirigencial, a nuestros funcionarios, sino también a toda la comunidad. Es un trabajo muy difícil y que lo hemos comprobado a lo largo de los años que llevamos trabajando en el tema con colegios, escuelas ; porque la historia no es un atractivo para la mayoría de la gente, la historia se hace mas (en un 80%) por amor que por algún interés económico. Leyendo hace poco este libro de Félix Luna "Soy Roca", he podido rescatar de uno de sus párrafos que dice "desde la historia es imposible lograr una moción popular", y esto quizás lo dice por algunas experiencias que haya tenido al respecto, y a nosotros nos ocurre exactamente lo mismo ; vemos, tanto Mirta que trabaja en Salta Capital y yo en el Valle Calchaquí, que la historia no es ningún atractivo para la juventud. Quizás nosotros debamos enfocar nuestros esfuerzos en la preservación, no viéndolos y enfocándolos desde la historia sino desde nuestra realidad socioeconómica.

Hemos comprobado también que en las pinturas de Guachipas o de Las Juntas, el Estado no ha logrado unificar criterios para la preservación de este patrimonio ; las empresas privadas siempre con su criterio economicista han esquivado su responsabilidad en la preservación. Entonces, viéndolo crudamente, somos muy pocos los que luchamos y trabajamos para preservar y proteger este patrimonio, es por ello que nos enorgullece tener con nosotros a especialistas y profesionales no solo de nuestra región sino también del extranjero, para que entre todos veamos y analicemos las problemáticas del tema que nos convoca.

En lo que hace a la interpretación de las pinturas rupestres, es uno de los temas mas difíciles, puesto que sabemos que nacen no solo de un consenso popular sino de la sugestividad aborigen y es muy difícil interpretarlo, desde el precerámico hasta los dibujos que aparecen en el período tardío, existe mucha diferencia, entonces no se puede hacer una análisis global o general del arte rupestre, necesariamente debemos sectorizarlo. Lo que tomamos nosotros se limita a un corto período de nuestra historia.

MIRTA SANTONI

Yo quisiera hacer una breve referencia a la historia del espacio donde están inscriptas estas pinturas rupestres sobre las que nosotros hemos trabajado y vamos mostrar ; de alguna es para justificar el título del libro que terminamos con Miguel Xamena en 1995.

Alrededor de 1582, o sea en el año de la fundación de Salta, Hernando de Lerma se adjudica para sí unas tierras que están en el sector llamado "Pampa Grande", 32 años mas tarde, esas mismas tierras y algunas otras estaban totalmente vacías. Entonces el Cabildo de Santiago del Estero y su vez el Gobernador del Tucumán en esa época le adjudica, le concede las tierras a un señor que se llamaba Matías de Lerma y que era un vecino de Salta, quien va a tomar posesión el 21 de octubre de 1616 mediante dos testigos. Esa propiedad, según reza la diligencia que sigue al documento de la merced, fue tomada posesión "en la tierra que llaman de Guachipas, camino que va de la ciudad de Salta a los Choromoros, y puesto los pies en ella por interpretación de un indio práctico de ellos que dijo llamarse las dichas tierras Oma Sacopo en su lengua y en la nuestra castellana quiere decir ‘El Seno de las Pirguas del Sol’, y que el principal río de las dichas tierras se llama río Mep que quiere decir río de la Anta, que sus vertientes van a dar a las pampas de los Choromoros, a la estancia que llaman de doña Petronila Garnica". Muchos años mas tarde, en 1876, Mariano Serreieta, en un documento publicado por la provincia transcribe un documento que dice así : "Pirguas del Sol, al Sud del departamento Guachipas, en la elevada cumbre de la serranía que divide el territorio de Guachipas de los Valles Calchaquíes y donde forma parte su vertiente el río de la Anta, existe una altura que se denomina por los indígenas de esos lugares El Seno del Sol, Pirgua del Sol, nombre alusivo a ser dicha altura el primer punto que en dicha serranía toca el sol en su nacimiento y ocaso ; este lugar era un adoratorio de las tribus Guachipas que se extendían hasta Colalao y Abra de Tafí". Estos elocuentes documentos nos hablan de frases muy vibrantes como por ejemplo "el seno de las pirguas del sol" que, aparte de estar lleno de contenido poético podemos sintetizar que es el lugar donde se almacena el sol. Por otro lado es interesante destacar que el nombre del río de "Anta" es el nombre que actualmente todavía lleva el río que divide el departamento de Guachipas en la provincia de Salta con la provincia de Tucumán, o sea la zona de los Choromoros, es decir que es un límite provincial. Nosotros en Pirguas del Sol intentamos tratar de explicar de alguna manera el contexto cultural de aquellos grupos indígenas y, hemos tomado como lugar de descripción un sitio que se llama de muchas maneras, Las Cuevas Pintadas, Las Cuevas de Las Juntas, Las Pinturas Rupestres de Guachipas, El Cerro Cuevas Pintadas ; hemos mantenido el nombre de "Cerro Cuevas Pintadas", ya que quien lo lanza al conocimiento del público en 1970 es el doctor Cigliano y lo denomina así, respetando y no queriendo sumar otro nombre al ya conocido.

Las pinturas van a ser un elemento de análisis y creemos que en ellas se van a reproducir toda una gama de actividades rituales que se enlazan con las creencias religiosas, que reflejan a parte de la estructura socioeconómica, las intimas relaciones con las fuerzas sobrenaturales de los grupos en su accionar con el medio. Nosotros no tenemos una Biblia andina que recopile la tradición religiosa de esta parte de América andina, ni tampoco sus fundamentos religiosos ; siempre podemos encontrar una serie de cultos y de realizaciones rituales que están en relación con por ejemplo la Pachamama, que están en relación con la siembra, la cosecha, la cría del ganado, la marcada o sea la señalada de la majada, donde se ofrece a la tierra las orejas de los animales y se entierran en una chuspa, se pide por la multiplicación del ganado ; cuando se inaugura una vivienda por ejemplo, se realiza la flechada, se realiza la mesa del culto en el día de los muertos para recibir y posteriormente despachar las almas en el día siguiente a las doce . Todo esto forma parte del sistema del pensamiento que no es nuevo, que viene desde hace muchísimos años, y que se entronca con las raíces prehistóricas, prehispánicas o arqueológicas. Son acciones que se realizan y programan en espacios especiales, en los espacios considerados sagrados, porque es allí en esos espacios donde recibe la fuerza y el poder, donde se revive el mito y donde se notan sus efectos, es en ese espacio en donde se generan, renacen y repiten los sucesos del tiempo primordial, donde se recrea el mito de origen poniendo sentido a la dualidad intrínseca y contradictoria del hombre. Eliade dice que el hombre no elige lugar sagrado, se limita a descubrirlo, por lo cual a partir de allí lo utiliza y respeta.

Volviendo brevemente a los documentos, ese espacio consagrado el adoratorio que alude el autor, concentra por un lado el doble significante de tipo topográfico espacial, donde expresa que se encontraba en la elevada cumbre que divide el territorio de Guachipas de los Valles Calchaquíes y de donde forma sus vertientes el río de la Anta ; y por otro lado, un doble significante ideacional y simbólico por ser dicha altura el primer punto que en dicha serranía toca el sol en su nacimiento y ocaso. No nos cabe dudas que este es un lugar que está dedicado al culto solar, al culto generalizado en toda América y la mayor deidad de los grupos andinos es el sol, deidad a la cual las etnias regionales también adoraban. El padre Del Techo por ejemplo en su libro refiere a las costumbres de los calchaquíes y expresa que son gente supersticiosa, adoran arboles adornados con plumas, consideran al sol como el dios mas importante y al trueno y relámpago como divinidades menores. El lugar del documento puede no ser el mismo al que nosotros presentamos en este estudio, pero sin embargo, es importante dejar sentado que en Guachipas existe una gran cantidad de sitios con arte rupestre, gran cantidad concentrada en esa zona de los hasta ahora conocidos. Hay una larga lista de sitios como Carahuasi, Ablomé, Las Canchadas, El Churcal, El Lajar, Pozo La Ciénaga, Guanaquitos, entre otros ; nosotros vamos a tratar el del Cerro Cuevas Pintadas.

El Cerro Cuevas Pintadas tiene en nuestro registro treinta y tres (33) aleros con pinturas. Posee dos caras, la norte, que es donde se ubica el alero que estudiamos y donde está el resto de los diecinueve (19) aleros. Nuestro trabajo se realizó en el alero Nº 5 y que se encuentra en este momento y desde hace unos 25 años rodeado por un alambrado que protege el acceso que en realidad es una cosa engañosa por que no protege ningún acceso ya que se trata de una pirca precaria y un alambre que se puede levantar sin ningún problema.

Dentro del contexto arqueológico, existen unas delimitaciones pircadas que abarcan cinco espacios circulares que están en la zona del piedemonte. Algunos aleros están asociados a pequeños morteros en su base. Lamentablemente no hay sedimentos en ninguno de ellos debido a las condiciones del terreno.

El motivo principal de casi todos los aleros es el camélido y por otro lado el "hombre escudo", también hay suris, felinos y escenas varias.

El alero mas elevado de la cara norte y que llamamos "el inaccesible" (Nº 22), tiene una figura en blanco que su perfil se asemeja, como todos los otros hombres escudos, a un adorno que llevan los dibujos de Guamán Poma de Ayala que se asigna a los grupos del área del Kollasuyo que portarían esto en forma de pectoral, conformando el prototipo del lugar.

En los aleros Nº 1, 2, 3 y 4 los diseños se presentan en color amarillento y que van marcando una especie de tiradera en una pintura primaria, mas antigua y, sobre ella una especie de animal aserrado similar a un ciempiés o un escorpión, no sabemos. En el caso de las pinturas mas antiguas los motivos principales son las llamas.

El alero Nº 8 es una pared muy grande, de unos 10 metros cuadrados, en donde existe una serie de representaciones de figuras de hombres largando o atrapando los cóndores en algunos casos. Sabemos por las crónicas e incluso por algunos documentales, que hay una ceremonia que se realiza en la zona andina, para el Inti Raimi, en donde participan los cóndores. Existen además algunos detalles que llamamos los brujitos o shamanes, antropomorfos que tienen una gran túnica, brazos que están hacia arriba y hacia abajo y una cabeza con una gran máscara y un gran tocado.

En una de las ceremonias descritas por el padre Del Techo, señala que se solía tirar maíz hacia atrás en el marco de una adoración al sol. Coincide con esta figura antropomorfa del "shamán", con su larga túnica que está arrojando algo a sus espaldas.

En el alero Nº 12 se pueden apreciar una serie de los que nosotros llamamos "guerreros clepsidras" alineados, son doce líneas de guerreros de seis cada una y, por debajo, unos hombres escudos bastante borrados pero que marcan la forma de construcción de la figura.

El techo del alero Ambrosetti (Nº 5) es el que contiene todas las figuras ; para poder mirar estas pinturas se debe estar acostado en el piso. Para nuestro trabajo dividimos en tres partes, porque existen pinturas en la zona baja que llamamos zócalo y en la pared alta o frontal donde se empleó el color negro y blanco fundamentalmente en la conformación de zoomorfos que posiblemente sean camélidos ; lo curioso es que sus extremidades terminan con una especie de zapatito.

En el techo propiamente dicho, tenemos varias escenas, una de ellas se refiere a representaciones de caza o de carabanas, no sabemos exactamente, donde hay una serie de animalitos en las cuales se combinan por ejemplo el blanco y el negro en lo que hace a pelaje ;hay animales por ejemplo que tienen una especie de montura negra, otros que están con un color negro escalonado desde la parte de los cuartos traseros hasta el cogote, otros de cuartos traseros y cogote negro, otros solamente la cabeza blanca. En el fondo de esta escena hay una figura antropomorfa alargada de color negro que porta un arco, la acompaña otra figura un poco mas atrás y esto indica una perspectiva.

El otro contexto que le sigue es un grupo de cinco hombres escudos, que tienen una riqueza en lo que hace a la combinación de los diseños geométricos que van a marcar de alguna manera el interior de los hombres escudos y los ricos tocados cefálicos. Estos tienen una gran calidad de terminación en líneas y diseño. El tema de los escudos es que ninguno de los "hombres escudos" es igual a otro, puede haber semejanzas en cuanto a la forma, color diseño geométrico del interior, etc., pero ninguno es igual.

Dentro de algunos "hombres escudos" se pueden apreciar diseños de la cara santamariana.

El gran complejo de esta área, que tiene unos ocho metros de largo y que nosotros hemos sintetizado en un original a escala de 1,15 m, es una escena en donde se combinan hombres escudos, figuras de shamanes y guerreros de forma oval y color blanco y negro que están en el centro ; éstos están rodeados por hombres escudos de diferentes coloraciones, los hay blancos y negros, rojos y negros, blancos y rojos, y a veces están los tres colores. Una particularidad de los hombres escudos es el instrumento que luego va a ser definido como "hachitas", que las tienen hacia los costados. Otra particularidad son las lanzas y arcos en diferentes proporciones y motivos. En las extremidades inferiores tienen unos adornos en las tobilleras, unos son blancos, otros rojos. Algunos dicen que los escudos son tales y estarían representando al elemento defensivo, que podría haber sido de cuero u otro material. En lo que hace a la proporción de las figuras, siempre lo hombres escudos van a ser las mas grandes y no hay figuras de shamanes que superen los 25 cm. pero si están adornadas por un tocado cefálico que indicaría algún tipo de jerarquía dentro de la sociedad.

Inmediatamente a la escena anterior observamos una pintura que lamentablemente está deteriorada por una especie de salitre. Se trata de figuras en negro que nosotros llamamos guerreros clepsidras, se encuentran enfrentados de a dos y podrían estar marcando una batalla, que podría ser una batalla ritual ; pero también en el costado izquierdo y con unos tocados con puntos blancos hay otros tipos de guerreros que tienen el interior blanco, nosotros llamamos a esto una batalla o al menos un encuentro bélico.

Continuando con el techo del alero y siempre hacia el lado oeste, la combinación de los colores y la presencia de los gorros cefálicos van a ir siendo cada vez mas ricos en cuanto a la variedad de diseños y motivos.

La figura mas grande de hombre escudo en este techo tiene aproximadamente unos 48 cm., esta figura parecería ser que está representando a la persona mas destacada dentro del grupo social y puede ser que esté presidiendo todo el conjunto de hombres escudos que están magníficamente hechos, siempre y cuando haya sido esta escena hecha de una vez.

En algunos diseños se puede ver como pectorales con un ajedrezado que es típico de los diseños de la cultura Belén, es sumamente importante esta definición, este ajedrezado que está formando parte de una tiara, de un adorno pectoral muy grande que llega hasta la cintura.

Por debajo de este hombre escudo de notables dimensiones se pude apreciar un rastro tridígito, nosotros opinamos que si esto puede haber estado relacionado con lo incaico, es factible que sea entonces el adorno de las tres plumas que adorna el bastón de mando que indica la jerarquía del inca. Se aprecia también un animal sumamente grande, excesivamente redondo, que posiblemente esté representando a un animal grávido.

Estos hombres escudos los encontramos escritos en muchas urnas santamarianas y Belén que están a lo largo de toda el área del noroeste argentino. Los vemos también en urnas y en petroglifos.

Hemos aislado los tipos de gorros que hemos podido detectar luego de revisar los diseños y hay 23 totalmente distintos combinando los colores en rojo, blanco y negro ; así también las formas, distintas formas que van a estar diferenciadas de acuerdo al personaje que los porta, tenemos de guerreros, de las figuras de "shamanes" y de los propios hombres escudos.

El hecho es que los hombres escudos también se encuentran en algunas expresiones de la cultura santamariana, con la tipicidad que le corresponde al Valle de Lerma, como el caso de pinturas (de hombres escudos) que aparecen en las paredes de urnas dedicadas a enterratorios de niños.

Pensamos que esta forma prototípica que fue la del hombre escudo, no solamente se muestra en urnas en forma plana, sino que posiblemente haya sido un momento posterior donde esto se voluminiza, es decir pasa a tomar la forma de la urna. La base de la urna se corresponde con el faldellín del escudo y el cuello con la parte superior. En el alero Nº 9 hay un hombre escudo que es exactamente igual a una urna que está en el Museo de Antropología de Salta.

Explicaciones o interpretaciones van a ser encontradas no solamente en el registro arqueológico, sino también en el folklore o los estudios de la antropología social, ya que por ejemplo, muchas de las cosas que hoy tenemos como la Pachamama, son cosas que vienen desde muy lejos en el tiempo.

Hay un trabajo de investigación de un francés que estuvo en el sur de Bolivia y que trabajó mucho tiempo en el área de la puna chilena y boliviana. Dice este autor que existe una clara conciencia de la antigüedad y continuidad de las costumbres, que definimos como tecnología simbólica. En este contexto es muy relevante la expresión de un pastor al que se le hizo la pregunta : ¿por qué habrán pintado así los antiguos?, a lo que el pastor respondió "yo creo que ha sido una costumbre tradicional, no sabría decir, es una tradición que ya no se hace, pero nosotros sí, tenemos una tradición que es muy parecida, que nosotros lo hacemos en greda y en un día de fiesta, en vísperas de navidad" y siguió un somero relato de la ceremonia que ellos la llaman hacer nacimiento, que comienza el 24 de diciembre, mientras ellos en la mañana modelan una serie de animalitos de greda que van a ser utilizados en la ceremonia del día siguiente, en la cual, entre otras cosas se sacrifica una llama, el pastor hace las ofrendas a la Pachamama, tira la sangre, etc., pero se tiene el extremo cuidado de que cada uno de estos animalitos de greda respondan lo mas posible a la realidad. La ceremonia es bastante larga y no quisiera desviarme del tema, lo cierto es que la perfección del diseño de estos animalitos de greda tienen mucho que ver con la realidad que ellos viven en cuanto a que tienen que ser perfectos porque, de hacerlos defectuosos, los animalitos con lo cual ellos piden que sus animales se multipliquen pueden traer los mismos defectos en la realidad.